Los datos muestran que en 2022, el valor agregado industrial total de China superó los 40 billones de yuanes, lo que representa el 33,2% del PIB; entre ellos, el valor agregado de la industria manufacturera representó el 27,7% del PIB, y la escala de la industria manufacturera ocupó el primer lugar en el mundo durante 13 años consecutivos.
Según los informes, China tiene 41 categorías industriales, 207 categorías industriales, 666 subcategorías industriales, es el único país del mundo con todas las categorías industriales en la clasificación industrial de las Naciones Unidas. 65 empresas manufactureras fueron incluidas en la lista de las 500 principales empresas del mundo en 2022, y se han seleccionado más de 70.000 pequeñas y medianas empresas especializadas.
Como país industrializado, China ha alcanzado logros impresionantes en su desarrollo industrial. Con la llegada de la nueva era, la conectividad y la inteligencia de equipos industriales se están convirtiendo en una tendencia importante, coincidiendo con el desarrollo de la tecnología del Internet de las Cosas.
Según la Guía Mundial de Gasto en Internet de las Cosas de IDC, publicada a principios de 2023, la inversión empresarial global en IoT en 2021 fue de aproximadamente 681.280 millones de dólares estadounidenses. Se prevé que alcance los 1,1 billones de dólares para 2026, con una tasa de crecimiento compuesto (TCAC) a cinco años del 10,8 %.
Entre ellos, desde la perspectiva de la industria, la construcción se rige por la política de reducción de emisiones de carbono y la construcción inteligente en las zonas urbanas y rurales de China, y promoverá aplicaciones innovadoras en los campos del diseño digital, la producción inteligente, la construcción inteligente, el Internet de la construcción, la robótica de construcción y la supervisión inteligente, impulsando así la inversión en tecnología del Internet de las Cosas (IoT). Con el desarrollo de la fabricación inteligente, las ciudades inteligentes, el comercio minorista inteligente y otros escenarios, las operaciones de fabricación, la seguridad pública y la respuesta a emergencias, y las operaciones omnicanal, como la gestión de activos de producción y operaciones, se convertirán en la principal dirección de inversión en la industria del IoT de China.
Como es la industria que más contribuye al PIB de China, aún vale la pena mirar hacia el futuro con ilusión.